Estados Unidos permitirá que los países europeos entrenen a los ucranianos en aviones de combate F-16, confirmó este domingo un alto funcionario de la administración Biden, una bendición potencial para los esfuerzos de Ucrania para contrarrestar la superioridad aérea de Rusia.
“El presidente ha dado luz verde y permitiremos, apoyaremos, facilitaremos y, de hecho, proporcionaremos las herramientas necesarias para que los ucranianos comiencen a ser entrenados en aviones tipo F-16, tan pronto como los europeos estén preparados”, le dijo el asesor de seguridad nacional de Estados Unidos, Jake Sullivan, a Jake Tapper de CNN en “State of the Union”.
La decisión consolida un cambio radical para el presidente Joe Biden, quien dijo a principios de este año que no creía que Ucrania necesitara los F-16. Uno de los principales problemas a los que se han enfrentado las fuerzas terrestres de Kyiv a medida que se pone en marcha su contraofensiva es que el poder aéreo ruso la frena. Rusia aún mantiene la superioridad aérea, lo que dificulta el avance de las fuerzas terrestres.
El avión de fabricación estadounidense tiene capacidad de reabastecimiento de combustible en el aire y es compatible con la mayoría de las armas de la OTAN que ya se suministran a Ucrania. A pesar de que entró en producción por primera vez en la década de 1980, ha pasado por varias actualizaciones, haciéndolo más avanzado y versátil que cualquier jet que Ucrania tenga actualmente en su flota, y un feroz rival para la mayoría de los aviones rusos, con excepción de los modelos más recientes que Moscú ha dudado en desplegar en Ucrania.
Sullivan señaló este domingo que los aliados europeos han dicho que necesitan varias semanas para preparar las habilidades de entrenamiento y que EE.UU. cumplirá con cualquier cronograma que establezcan.
el obstáculo para garantizar que este entrenamiento F-16 pueda comenzar”, dijo.
Volviendo a la defensa nacional de EE.UU., Sullivan lamentó el proyecto de ley de política de defensa aprobado por la Cámara de Representantes que incluye la adopción de varias enmiendas controvertidas que tocaron temas sociales candentes.
“Esta legislación nunca llegará al escritorio del presidente porque lo que ha visto de un grupo extremo de republicanos es presentar una serie de enmiendas que intentan mezclar los debates sociales internos con las necesidades de seguridad”, dijo Sullivan.
La adición de enmiendas impulsadas por los conservadores de línea dura relacionadas con la política de aborto y el acceso a la atención médica para personas transgénero, así como los programas de inclusión y diversidad enfurecieron a los demócratas, y ahora provocarán un enfrentamiento con el Senado controlado por los demócratas.
Sullivan, que fue presionado para reconocer que el proyecto de ley fue aprobado siguiendo líneas partidistas pero apoyado por la mayoría de los legisladores republicanos de la Cámara, argumentó que el proceso había sido secuestrado por un “pequeño grupo de republicanos”.
“Una gran cantidad de personas en la Cámara, incluidos los republicanos, en mi opinión, no están particularmente interesadas en que la política entre en medio de la Ley de Autorización de Defensa (Nacional)”, dijo Sullivan, refiriéndose al nombre oficial de la proyecto de ley de política de defensa.
“Así que fue un pequeño grupo de republicanos quienes esencialmente crearon una trampa. Una circunstancia en la que no necesitamos encontrarnos”.
En mayo, Biden había informado a los líderes del G7 que EE.UU. apoyaría un esfuerzo conjunto con aliados y socios para capacitar a pilotos ucranianos en aviones de cuarta generación, incluidos los F-16, aunque en ese momento no estaba claro cuándo comenzaría ese entrenamiento.