La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo ha zanjado la controversia sobre la supuesta presencia de agencias estadounidenses en operativos dentro de México, tras la contundente aclaración emitida por la Embajada de Estados Unidos en México.
La embajada, en respuesta a un programa de radio, desmintió categóricamente la participación de sus agencias en operaciones en territorio mexicano, reafirmando el respeto a la soberanía nacional.
«Nosotros no aceptamos injerencismos,» enfatizó Sheinbaum, subrayando el cambio en la relación bilateral en comparación con administraciones pasadas. «Defendemos la soberanía nacional.»
La presidenta explicó que, si bien existe una estrecha coordinación y colaboración entre México y Estados Unidos, como la certificación de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) de la Fiscalía General de la República (FGR) por agencias estadounidenses, esta colaboración no implica la participación directa de agentes extranjeros en operativos dentro del país.
«La información sobre la supuesta participación de agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) en el desmantelamiento de laboratorios de drogas es falsa,» reiteró Sheinbaum, respaldándose en el comunicado oficial de la embajada estadounidense.
Al ser cuestionada sobre la naturaleza de la certificación de la AIC, Sheinbaum aclaró que se trata de un proceso heredado de administraciones anteriores al gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador. «Es algo que viene de hace mucho tiempo,» explicó. «Esta certificación de la Agencia de Investigación Criminal es de la Fiscalía General de la República.»
Ante la pregunta de si esta certificación debería ser cancelada, Sheinbaum respondió que correspondería al Fiscal General determinar el sentido de dicha certificación.
En cuanto a la colaboración bilateral, Sheinbaum destacó que, si bien México no certifica a ninguna policía estadounidense, sí comparte información que facilita operativos del otro lado de la frontera. «Por ejemplo, (por) una información que se dio sobre lo que estaba ocurriendo en Arizona, operaron las fuerzas del gobierno de los Estados Unidos para incautar droga y armas,» ejemplificó.
Un punto crucial en la relación bilateral, según Sheinbaum, es el cambio en la prioridad de Estados Unidos respecto al tráfico de armas. «A raíz del diálogo con el gobierno estadounidense, por primera vez ese país tiene como una de sus prioridades incautar armas de Estados Unidos a México,» destacó. «En el pasado fue al revés; con Rápido y furioso metieron armas a México con la idea de que algún día iban a detener a personas de la delincuencia organizada.»
Sheinbaum resaltó el reciente operativo en el puerto Del Río, Texas, como un ejemplo de la colaboración actual en la incautación de armas provenientes de Estados Unidos.