La administración del expresidente Donald Trump ha solicitado a un tribunal federal de apelaciones una suspensión de la orden judicial que impide aplicar aranceles a dos fabricantes estadounidenses de juguetes. La petición se da en medio de una serie de reveses judiciales que cuestionan el uso de poderes de emergencia para imponer medidas comerciales durante su mandato.
El recurso, presentado este lunes, responde a una decisión del juez federal Rudolph Contreras, quien la semana pasada falló a favor de las compañías Learning Resources y hand2mind, argumentando que sufrirían daños irreparables si se les aplicaban los aranceles establecidos bajo la Ley de Poderes Económicos de Emergencia Internacional (IEEPA, por sus siglas en inglés). Además, el juez dictaminó que dicha ley no contempla los aranceles impuestos por Trump, debilitando así uno de los pilares jurídicos de su política comercial.
La Casa Blanca argumentó que suspender los aranceles socavaría su posición negociadora con otros países y restaría credibilidad a las sanciones como herramienta diplomática. En su solicitud, la administración también aseguró que el tribunal de distrito carece de jurisdicción, y que el asunto corresponde exclusivamente al Tribunal de Comercio Internacional de EE.UU.
Este episodio se suma a una semana legalmente convulsa para los aranceles impulsados por Trump. El 28 de mayo, un tribunal de comercio especializado determinó que el expresidente excedió sus facultades al imponer una serie de aranceles amplios, entre ellos los llamados aranceles del «Día de la Liberación», y los dirigidos a productos provenientes de China, México y Canadá, justificados bajo la lucha contra el tráfico de fentanilo. Sin embargo, esa decisión fue apelada de inmediato, y menos de 24 horas después fue temporalmente revertida por un tribunal de apelaciones federal.
En paralelo, el juez Contreras suspendió su fallo por dos semanas, pero ordenó proteger a las dos empresas de juguetes de la aplicación de los aranceles, independientemente del desarrollo del caso en el tribunal comercial.
Richard Woldenberg, director ejecutivo de Learning Resources, expresó su confianza en que el fallo será ratificado en instancias superiores. “Estamos muy complacidos con el fallo del tribunal de distrito y creemos que su lógica será confirmada”, declaró a CNN.
Este caso, aunque enfocado en dos compañías específicas, forma parte de una batalla legal más amplia con el potencial de redefinir los límites del poder ejecutivo en materia de comercio internacional, y podría tener implicaciones significativas para el futuro de la política arancelaria en Estados Unidos.