El papa Francisco se encuentra de buen ánimo mientras continúa su recuperación en el hospital Gemelli de Roma. Los médicos han confirmado que su vida ya no corre peligro y evalúan el momento adecuado para darle el alta, tras 26 días de hospitalización debido a problemas respiratorios.
Progreso en su estado de salud
Según fuentes vaticanas, el pontífice de 88 años sigue con fisioterapia y ejercicios para fortalecer su capacidad respiratoria. En la mañana del martes, participó a distancia en ejercicios espirituales desde el Vaticano y rezó en la capilla privada del hospital.
El último informe médico, emitido el lunes por la noche, señaló que su estado es estable y que el pronóstico dejó de ser reservado. Sin embargo, debido a la complejidad de su cuadro clínico y a las infecciones presentes al momento de su ingreso, los especialistas han decidido prolongar su tratamiento algunos días más sin precisar una fecha de salida.
Expectativa por su regreso al Vaticano
A pesar de la evolución favorable, una fuente vaticana negó que se estén haciendo preparativos en la residencia de Santa Marta para su regreso, lo que sugiere que su alta médica aún no es inminente.
Mientras tanto, fieles continúan reuniéndose en la entrada del hospital para dejar velas, flores y rosarios, pidiendo por su pronta recuperación.
La hospitalización más prolongada de su pontificado
Francisco fue ingresado el pasado 14 de febrero con un cuadro de bronquitis que evolucionó en neumonía bilateral. Esta ha sido su hospitalización más larga y complicada desde el inicio de su pontificado en 2013.
Su estado de salud ha sido motivo de preocupación, pues en los últimos años ha enfrentado diversas afecciones, incluidas cirugías en el colon y el abdomen, problemas de movilidad y sobrepeso. Aunque en varias ocasiones ha descartado la posibilidad de renunciar, su prolongada ausencia ha reavivado el debate sobre su capacidad para continuar liderando la Iglesia.
Semana Santa y su regreso a la actividad
El papa no ha aparecido en público desde su ingreso y la única prueba de su presencia ha sido un audio reciente en el que se le percibe con la voz cansada y la respiración entrecortada. Además, tuvo que ausentarse de la celebración del Miércoles de Ceniza, lo que generó dudas sobre si podrá retomar sus actividades en Semana Santa y Pascua.
A pesar de las dificultades, su recuperación avanza y millones de fieles esperan verlo pronto retomando su labor, aunque sea con algunas limitaciones.