China lanzó “ataques con misiles de precisión” alrededor de Taiwán el jueves cuando comenzó alarmantes ejercicios militares como represalia por la visita de la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi.
Los medios estatales mostraron imágenes del lanzamiento de varios misiles de la serie Dongfeng, mientras que los videos compartidos en las redes sociales captaron a los bañistas mirando con incredulidad cómo los cohetes se elevaban cerca, según publicó el diario New York Post.
“Se llevaron a cabo ataques con misiles de precisión de fuego real armados de largo alcance en objetivos seleccionados en el área este del Estrecho de Taiwán”, confirmó el Comando del Teatro del Este del Ejército Popular de Liberación, el ala militar del gobernante Partido Comunista.
“Se logró el resultado esperado”, agregó, y dijo que también “probó exhaustivamente la capacidad de combate de las tropas en condiciones reales de combate”.
Según los informes, los barcos de la marina china y los aviones militares también cruzaron la línea media del Estrecho de Taiwán varias veces el jueves por la mañana a medida que las tensiones en la región aumentaron a su nivel más alto en décadas.
“Se colaron y fueron ahuyentados por nosotros”, dijo una fuente taiwanesa. “Continúan acosándonos y aumentando nuestra presión de defensa aérea”.
La agencia oficial de noticias Xinhua de China informó que los ejercicios fueron operaciones conjuntas centradas en “bloqueo, asalto a objetivos marítimos, ataque a objetivos terrestres y control del espacio aéreo”.
La estadía de 19 horas de Pelosi en Taiwán, la visita estadounidense de más alto nivel en 25 años, indignó a Beijing, que trata a la isla autónoma como parte de su territorio soberano y consideró la visita como su apoyo a su independencia.
“Nuestro castigo a los intransigentes a favor de la independencia de Taiwán, las fuerzas externas, es razonable, legal”, dijo la Oficina de Asuntos de Taiwán con sede en Beijing de China.
Mientras tanto, el ministro de Relaciones Exteriores de China, Wang Yi, calificó la visita de Pelosi como un acto “maníaco, irresponsable y altamente irracional”.
La última vez que China disparó misiles en aguas alrededor de Taiwán fue en 1996.
Los ejercicios actuales, que involucran a la marina, fuerza aérea, fuerza de cohetes, fuerza de apoyo estratégico y fuerza de apoyo logístico, parecen ser los más grandes realizados cerca de Taiwán en términos geográficos.
El gobernante Partido Progresista Democrático de Taiwán acusó a China de “comportamiento irresponsable e ilegítimo” con los simulacros, que continuarán hasta el domingo.
El bloque regional de la ASEAN del sudeste asiático advirtió el jueves sobre el riesgo de “errores de cálculo, confrontaciones graves, conflictos abiertos y consecuencias impredecibles entre las principales potencias”.
El jueves, los ocho principales artículos de tendencia en el principal sitio de redes sociales de China, Weibo, estaban relacionados con la visita de Taiwán y Pelosi, y muchos escribieron: “Reunifiquemos la patria”.
Algunos también celebraron el viaje de Pelosi como la excusa que China necesitaba para finalmente “tomar Taiwán por la fuerza”.
“Creo que deberíamos agradecer a la camarada Pelosi”, dijo un hombre de apellido Zhao en el distrito central de negocios de Beijing.
La seguridad alrededor de la embajada de EE.UU. en Beijing también se mantuvo inusualmente estricta el jueves, luego de que el embajador fuera convocado anteriormente para escuchar las protestas oficiales sobre la visita del presidente de la Cámara.
El portavoz de seguridad nacional de la Casa Blanca, John Kirby, dijo a principios de semana que el viaje de Pelosi no constituía una violación de la soberanía china ni de la política estadounidense de “una sola China”.
Estados Unidos no tiene relaciones diplomáticas oficiales con Taiwán, pero está obligado por la ley estadounidense a proporcionarle los medios para defenderse.