Los temores de contagio financiero tras el colapso de Silicon Valley Bank en EEUU se han trasladado a Europa y las alarmas se han activado en torno a la situación de Credit Suisse. Las acciones de la entidad se desploman más de un 20% en la Bolsa de Zúrich este miércoles y las dudas sobre su viabilidad han trasladado el pánico al sector bancario europeo, que acumula una nueva jornada negra en bolsa.
El castigo de los inversores en España se centra en Banco Sabadell, que vuelve a protagonizar la mayor caída en el Ibex 35. La entidad se hunde este miércoles más de un 8% y sus títulos pelean por mantener el euro de valoración tras varios días de descensos acumulados por el impacto de la crisis de SVB.
Las correcciones también son elevadas para el resto de entidades presentes en el selectivo madrileño. BBVA se deja más de un 7%; Bankinter, un 6,5%; Santander, un 6,15%; CaixaBank, un 5,75% y Unicaja, un 5,1%.
Las caídas se repiten en otros grandes bancos regionales, contagiadas también por las dudas de los inversores sobre la estabilidad del sistema financiero. BNP Paribas cae un 7,86%; Société Générale, un 8,07%; ING, un 6,44%; Commerzbank, un 6,45%; Deutsche Bank, un 6,16% y Unicredit, un 5,46%.
El origen de los temores en esta sesión se encuentra en Suiza, donde el futuro de Credit Suisse, uno de sus principales bancos, vuelve a estar en cuestión. Las alarmas se han disparado después de que el Banco Nacional Saudí, su principal accionista, haya confirmado que no dará a la entidad suiza más asistencia financiera para hacer frente a sus delicadas cuentas.
«No podemos porque superaríamos el 10% (del accionariado), es una cuestión regulatoria», indicó en declaraciones a la agencia Bloomberg.
El banco saudí adquirió el pasado año ese 10 % de acciones en la ampliación de capital lanzada por Credit Suisse, una inversión en el que la entidad de Oriente Medio invirtió 1.500 millones de francos suizos (1.530 millones de euros).
En 2022 el banco zuriqués arrojó pérdidas por valor de 7.293 millones de francos suizos (unos 7.400 millones de euros) en 2022, 4,5 veces más que en 2021.
Afectado por su exposición a firmas de riesgo con problemas financieros tales como Archegos o Greensill, Credit Suisse sufrió además el pasado año la retirada de liquidez por valor de 123.200 millones de francos suizos (126.000 millones de euros).