El 8 de junio, el influencer conservador Benny Johnson desató controversia en redes sociales tras publicar un video en su cuenta de X (antes Twitter), en el que acusa a la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, de convocar a protestas en Estados Unidos. Sin embargo, el contenido fue editado y sacado de contexto, generando una narrativa falsa que rápidamente se viralizó entre sectores afines al expresidente Donald Trump.
Un video recortado y descontextualizado
El material difundido por Johnson corresponde en realidad a una declaración de Sheinbaum del 24 de mayo, durante un evento en San Luis Potosí. En ese momento, la mandataria mexicana habló sobre posibles movilizaciones en caso de que el gobierno estadounidense impusiera un impuesto a las remesas que envían los mexicanos desde EE.UU., calificando la medida como injusta para quienes «sostienen a sus familias y ayudan a la economía de ambos países».
Sin embargo, el video fue publicado el 6 de junio, justo cuando estallaban protestas en ciudades como Los Ángeles, en rechazo a las redadas contra migrantes irregulares impulsadas por la administración Trump. Johnson acompañó el video con la frase: “Ahora la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, llama a protestar en Estados Unidos”, distorsionando el mensaje original.
Reacción en medios y funcionarios estadounidenses
El contenido manipulado fue amplificado por cuentas alineadas con posturas pro-Trump y sitios identificados por difundir desinformación, como wltreport.com y portales rusos como rg.ru. Incluso, la Secretaria de Seguridad de EE.UU., Kristi Noem, hizo eco de la versión errónea y afirmó desde la Casa Blanca: “Claudia Sheinbaum alentó las protestas en Los Ángeles y la condeno por ello”, mientras Trump escuchaba.
Ante estas acusaciones, Sheinbaum respondió de inmediato. En su conferencia del 9 de junio, publicó un video en el que aclaró su postura:
“Condeno claramente las manifestaciones violentas. Siempre hemos estado en contra de ello. Nuestra posición es y seguirá siendo la defensa de los mexicanos honestos, trabajadores, que apoyan tanto a Estados Unidos como a sus familias en México”.
Una narrativa con fines políticos
El tuit original de Johnson superó los 7 millones de visualizaciones y fue compartido más de 12,000 veces. El uso de este tipo de contenido editado es parte de una estrategia para posicionar a Sheinbaum como una figura antagónica en la política migratoria de Trump, en un contexto de creciente tensión entre ambos países.
Mientras tanto, desde sectores conservadores y medios pro-rusos se insiste en vincular a la presidenta mexicana con un supuesto llamado a la desobediencia en EE.UU., a pesar de que las declaraciones originales nunca mencionaron las redadas ni las protestas migrantes.
Una relación bajo presión
Históricamente, México y Estados Unidos han mantenido una relación bilateral compleja, pero funcional. No obstante, con el regreso de Donald Trump a la presidencia y su retórica nacionalista, este vínculo enfrenta nuevos desafíos. La campaña de desinformación contra Sheinbaum podría ser el inicio de una etapa más ríspida, donde los gestos diplomáticos se ven eclipsados por narrativas polarizantes.